Las tensiones han aumentado entre Malí, sus vecinos africanos y Occidente después de que el gobierno de Malí permitió que mercenarios rusos del Grupo Wagner se desplegaran en su territorio.
“Los soldados malienses que estaban tan bien entrenados luego salieron y pelearon con las fuerzas rusas, no sé al 100 por ciento si fueron las fuerzas de Wagner cada vez o no, pero pelearon con las fuerzas rusas y también hubo violaciones de derechos humanos. Y eso no puede ser de lo que se trata. No solo entrenar, sin importar lo que suceda después, sino actuar según los principios. Y es por eso que hemos terminado la misión de entrenamiento “, dijo la ministra de Defensa alemana, Christine Lambrecht, en una discusión en Berlín.
El portavoz del canciller Olaf Scholz, Steffen Hebestreit, había dicho en un escueto comunicado que el Gobierno propondrá al parlamento conceder una última prórroga de un año a la misión en Malí en mayo “para permitir que este despliegue se elimine gradualmente de forma estructurada después del 10 de mayo”. años.”
La idea es tener en cuenta las elecciones en Malí que se esperan para febrero de 2024, dijo.
Las misiones militares alemanas en el extranjero requieren un mandato del parlamento, que normalmente se otorga anualmente.
El mandato actual de participación de Alemania en la misión de la ONU conocida como MINUSMA permite el despliegue de hasta 1.400 efectivos.
Gran Bretaña anunció la semana pasada que retiraría sus tropas de la misión de la ONU en Malí, diciendo que la creciente dependencia del país de África occidental de los mercenarios rusos está socavando la estabilidad.
Gran Bretaña no dio un cronograma para su retiro.
Francia anunció a principios de este año que retiraría su propia fuerza, mucho más grande, de Mali después de que las relaciones se deterioraran con una junta que tomó el poder en 2020.
Francia, la antigua potencia colonial en Malí, dirigió una misión de nueve años y tuvo en su punto máximo 5.500 soldados en el país para combatir a los militantes islámicos.
