El Gobierno de Alemania ha ordenado este lunes la salida del país de la embajadora de Chad como represalia a la “expulsión infundada” ordenada previamente contra el principal representante diplomático en el país africano.
“Lamentamos mucho que se haya llegado a esta situación”, ha dicho un portavoz del Ministerio de Exteriores alemán, que ha dado dos días de plazo para irse a la embajadora chadiana, Mariam Ali Moussa.
Berlín ha defendido que el embajador alemán en Yamena, Jan-Christian Gordon Kricke, ha ejercido su labor de manera ejemplar, frente a quienes le acusan de una “actitud descortés” y “falta de respeto a las costumbres diplomáticas”. La prensa local especula con que la expulsión pudo deberse a las críticas al Gobierno de transición chadiano.
El embajador alemán se había mostrado crítico con el proceso de transición política del país africano tras la represión de las movilizaciones del 20 de octubre y varios días posteriores, que se saldaron con cerca de 130 muertos, según el balance publicado por la Comisión Nacional de Derechos Humanos de Chad.