El Tribunal Superior de Zimbabue dictamina una ley que prohíbe los servicios de aborto a mujeres violadas por sus maridos y a niñas menores de 18 años. La resolución fue emitida el 22 de noviembre y se ha publicado esta semana.
La sentencia es significativa, dadas las restrictivas leyes sobre el aborto en Zimbabue, que a menudo llevan a las mujeres y niñas a abortos clandestinos, ilegales e inseguros, que en muchos casos resultan fatales.
En Zimbabue, el aborto está permitido en muy pocas circunstancias, como cuando el embarazo pone en peligro la vida de la mujer o existe el riesgo de un defecto físico o mental “de tal naturaleza que (el niño) quede permanentemente discapacitado”. Las mujeres también pueden acceder a servicios de aborto legal en casos de relaciones sexuales ilícitas, como el incesto.
En septiembre, Zimbabue penalizó las relaciones sexuales con cualquier persona menor de 18 años, tras una sentencia anterior del tribunal constitucional que ordenaba al parlamento elevar la edad legal de consentimiento para las relaciones sexuales de 16 a 18 años. Pero la altamente restrictiva Ley de Interrupción del Embarazo todavía negaba los servicios de aborto a las niñas menores de 18 años.
El juez Maxwell Takuva dijo que, dado que las leyes de Zimbabue ya penalizan la violación conyugal y las relaciones sexuales con un menor, se debería permitir a las víctimas abortar si quedan embarazadas. “No hay duda de que es tortura, trato cruel y degradante que un niño lleve a otro niño, que un niño dé a luz a otro niño o que un niño sea obligado a abortar ilegalmente debido a circunstancias crueles”, afirmó el juez.
El Gobierno no presentó ninguna oposición al caso, que fue presentado por un grupo de derechos de las mujeres, aunque el fallo aún debe ser aprobado por el Tribunal Constitucional para ser efectivo.
El juez dijo que brindar acceso a servicios de aborto legal y seguro para niñas menores de edad “es importante a la luz de los casos masivos de embarazos adolescentes en Zimbabue y, en consecuencia, de abortos ilegales y mortalidad adolescente”.
En este país de millones de habitantes se producen anualmente unos 77.000 abortos inseguros, pero muchos otros no se denuncian. Según la agencia de las Naciones Unidas para la infancia, (UNICEF), muchas niñas y mujeres mueren cada año por complicaciones derivadas de abortos.
Según cifras del gobierno y de UNICEF, casi una de cada cuatro niñas queda embarazada entre los 10 y los 19 años. Una de cada tres niñas se casa antes de cumplir los 18 años en este país profundamente conservador del sur de África, donde las niñas suelen verse obligadas culturalmente a casarse con hombres responsables de sus embarazos no planificados.
