En el presente mes de marzo se celebraron en Beijing la segunda sesión de la XIV Asamblea Popular Nacional (APN) y del XIV Comité Nacional de la Conferencia Consultiva Política del Pueblo Chino (CCPPCh).
Como una ventana importante para ilustar el desarrollo económico y social de China y sus políticas, este “acontecimiento de primavera” ha mostrado al mundo la fuerte resistencia y la gran vitalidad de la economía china a través de una serie de llamativos datos económicos y nuevos objetivos e iniciativas.
Las brillantes perspectivas de la economía china inyectan continuamente confianza y fuerza al desarrollo económico mundial, asegura el informe.
La misma fuente recoge que el año pasado 2023, pese al estrés externo y dificultades internas, la economía china alcanzó con éxito los principales objetivos y tareas fijados para el desarrollo económico y social de todo el año con resultados satisfactorios.
En este sentido, el Producto Interior Bruto (PIB) de China en 2023 superó los 126 billones de yuanes (aproximadamente 17,52 billones de dólares) con una tasa de crecimiento del 5,2%, cuyo incremento equivale al volumen económico anual de un país de tamaño mediano, de tal modo que China sigue siendo el mayor motor del crecimiento económico mundial, con una contribución del 32%.
En relación a la situación del mercado laboral, el informe indica que se crearon 12,44 millones de nuevos empleos urbanos, con un aumento de 380 mil respecto al año anterior, mientras que la tasa de desempleo disminuyó un 0,4%. El PIB per cápita superó los 12.000 dólares, la renta disponible per cápita registró un ascenso del 6,1%, y se reduce continuamente la diferencia de ingresos entre zonas urbanas y rurales.
Además, se mantuvo una establilidad general de los precios de consumo y una balanza entre las importaciones y exportaciones. Las reservas de divisas superaron 3,2 billones de dólares a finales del año en cuestión.
El informe subraya que esta serie de datos y hechos demuestran plenamente la fuerte resiliencia, el enorme potencial y la gran vitalidad de la economía de China, cuyas tendencias fundamentales al mejoramiento a largo plazo no han cambiado. “La economía china no es un estanque, sino un océano”, dijo que el presidente Xi Jinping, quien usó la palabra “océano” para referirse a la gran resiliencia y potencialidad de la economía china.
Como la segunda economía mundial y la primera en el sector manufacturero, China tiene un sistema industrial completo y es el único país que cuenta con todas las categorías industriales de la clasificación industrial internacional de las Naciones Unidas. Además, el grupo de ingresos medios de China supera los 400 millones de personas y sigue creciendo, lo cual refleja el mercado supergrande que tiene el país. China ocupa el primer puesto mundial en cuanto a los recursos humanos de talento, de ciencia y tecnología, así como de investigación y desarrollo, y su “dividendo demográfico” está convirtiéndose en el “dividendo de talento”, recoge el documento.
Por otro lado, el informe asegura que todas estas características enumeradas han manifestado las ventajas significativas de la economía de mercado socialista y han proporcionado una sólida quilla para que el gigantesco barco de la economía china avance contra viento y marea, navegue con seguridad y llegue lejos.