Javier Bardem recibió un premio en forma de candidatura por su papel enBeing the Ricardos, aunque en su categoría Benedict Cumberbatch y Will Smith partían con seria ventaja. Al igual que sucede en el caso de Penélope Cruz, la de Bardem es su cuarta nominación, la tercera como protagonista (Antes de que anochezca, 2001; y Biutiful, 2011), tras el Oscar como secundario que logró en 2008 por No es un país para viejos.
En cualquier caso, como indicábamos, Benedict Cumberbatch, por El poder del perro, y Will Smith, por El método Williams, eran los grandes favoritos a alzarse con el Oscar a Mejor Actor, dejando como meros convidados de piedra al propio Bardem, a Andrew Garfield por Tick, Tick, Boom, y a Denzel Washington por La tragedia de Macbeth.
Y finalmente Will Smith ha hecho buenos todos los pronósticos tras arrasar en la temporada de premios previa a los Oscar por su papel en El método Williams. Tras lograr el Globo de Oro, el Bafta o el Premio del Sindicato de Actores, el polifacético artista norteamericano ha logrado la preciada estatuilla tras estar nominado por Ali (2002) y En busca de la felicidad (2007). Eso sí, el actor no las tiene todas consigo ya que la estatuilla le podría ser retirada por su mala actitud con Chris Rockdurante la ceremonia de los Oscar.
El Método Williams es un biopic sobre Richard Williams, el padre de dos de las deportistas más extraordinarias de todos los tiempos, dos mujeres que crecieron con una exigencia máxima para acabar convirtiéndose en leyendas del tenis. Richard tenía una visión muy clara y un plan para sus hijas, Venus y Serena, que confiaron en los métodos arriesgados y poco convencionales de su padre para llegar desde las calles de Compton, California, al olimpo del deporte. Y Will Smith ha logrado una interpretación impecable del padre de familia.
Las impactantes declaraciones en su discurso
En su discurso de ganador, Will Smith defendió los valores de la familia y la importancia que tiene en su vida: “Richard Williams fue un acérrimo defensor de su familia. En este momento de mi vida, estoy abrumado por lo que Dios me pide que haga y sea. He sido llamado a proteger a mi gente, a ser un río para mi gente. Para estar en este espectáculo tienes que aguantar insultos”. Además, pidió perdón a la Academia tras el momento que protagonizó abofeteando a Chris Rock: “Quiero ser embajador del amor. Quiero pedir disculpas a la Academia, al resto de los nominados. Es un momento precioso; mis lágrimas no son por ganar el Oscar, sino por arrojar luz a todo el reparto de El método Williams. El arte imita a la vida, y yo he parecido el padre zumbado. El amor te hace hacer cosas increíbles”.
Por último, el ganador del Oscar a mejor actor bromeó sobre su madre, que no pudo asistir a la gala porque tenía cita con su grupo de ganchillo. Antes de finalizar, Will Smith se despidió pidiendo a la Academia que le “vuelva a invitar”.
