Angola, uno de los 13 países miembro de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP), abandonará finalmente dicha entidad después de que, a finales de noviembre, rechazase y anunciase que incumpliría deliberadamente la cuota de producción de crudo que se le había asignado.
“Angola ha decidido marcharse. Creemos que ha llegado el momento de que nuestro país se centre más en nuestros objetivos”, ha declarado este jueves el ministro de Recursos Minerales y Petróleo, Diamantino Azevedo, a la emisora estatal ‘TPA’.
Según la pasada reunión de la OPEP, que se retrasó cuatro días ante los desacuerdos con los países africanos por esta cuestión, a Angola se le autorizó la extracción diaria de 1,11 millones de barriles a partir de enero de 2024. Sin embargo, Luanda ya avisó de que bombearían 1,18 millones de barriles.
“Produciremos por encima de la cuota fijada por la OPEP”, aseguró el representante angoleño ante el ‘cartel del petróleo’, Estevão Pedro. “No se trata de desobedecer a la OPEP; hemos presentado nuestra posición, y la OPEP debería tenerla en cuenta”, añadió.
Además, Pedro ya puso en duda la continuidad de Angola en la organización tras afirmar que la salida se trataría de una decisión que dependía de “las más altas autoridades”. De este modo, si se consuma la retirada, la nación africana se unirá a Qatar, Indonesia y Ecuador como países que han abandonado la OPEP.
En la cita de noviembre varios países acordaron acometer recortes voluntarios adicionales para hacer un total de 2,2 millones de barriles diarios con el objetivo de “apoyar la estabilidad y el equilibrio de los mercados del petróleo”.
Estas reducciones extra se correspondieron con Arabia Saudí (1 millón b/d), Irak (223.000 b/d), Emiratos Árabes Unidos (163.000 b/d), Kuwait (135.000 b/d), Kazajistán (82.000 b/d), Argelia (51.000 b/d) y Omán (42.000 b/d) a partir del 1 de enero y hasta finales de marzo de 2024.
Los recortes se sumarían al anunciado por parte de Rusia de 500.000 barriles diarios para el mismo periodo, el cual se realizará a partir de los niveles promedio de exportación de los meses de mayo y junio de 2023, y consistirá en 300.000 barriles diarios de crudo y 200.000 barriles diarios de productos refinados.
