El consumo de ‘Eboga’, así como los ‘rituales de buti y mibili’ no están reconocidos en la Ley número 04/1985, de fecha 24 de octubre, por la que se crea el servicio de la medicina tradicional en Guinea Ecuatorial. Así de claro lo señala el Fiscal General de la República Anatolio Nzang Nguema, quien sigue mostrando su disconformidad con el comportamiento de los curanderos tradicionales practicantes de estos rituales en el país.
“El Ministerio Fiscal recuerda a todos los ciudadanos que el ejercicio de cualquier derecho se tiene que desempeñar dentro de los márgenes legalmente establecidos. Por lo tanto, la actividad que este país reconoce es la actividad de medicina tradicional”, indica
Anatolio Nzang Nguema, quien afirma que tanto el consumo de ‘eboga’ y los que realizan bailes bajo la cobertura de mibili, buti y adivinaciones son prácticas recientes en la sociedad ecuatoguineana. La alta emigración sufrida por los ecuatoguineanos en la década de los 60 “puede ser precisamente el origen de estas prácticas. Muchos de los que se fueron a Gabón de regreso trajeron estas costumbres”, asegura el Fiscal General.
Para una mejor regulación y control de esta situación a fin de evitar meter en el mismo paquete a todos los curanderos tradicionales cuya actividad reconoce la ley, Nzang Nguema pide una reacción inmediata al Ministerio de Sanidad, tomando incluso cuantas decisiones que estime convenientes para frenar a los que dicen ser curanderos, pero que se salen de los límites legalmente establecidos.
Igualmente, el Fiscal General exhorta a que se inicien acciones legales bien sean administrativas o penales contra los infractores de la Ley número 04/ 1985 de, fecha 24 de octubre. “Son actitudes fraudulentas, hay que salvaguardar la imagen de la población”, asegura Nzang Nguema, quien también invita a los ciudadanos no quedarse en silencio. “Hay que denunciar cualquier acto de violación que se vean sometidos ya sea moral, psíquico, etcétera. Tienen derecho a dar parte en la Fiscalía, Policía, Ministerio de Sanidad y el de Seguridad, etc”, apostilla Anatolio Nzang Nguema, Fiscal General de la República.
Aun con todo eso, el número de curanderos que danzan el mibili, buti y practican el consumo de ‘Eboga’, que es una sustancia alucinógena que se extrae de unas plantas cuyos frutos son amarillentos, es considerable en Guinea Ecuatorial.