Rusia decidió restringir parcialmente a partir de este viernes el acceso a la red social Facebook en el país por censurar a medios rusos en medio de la guerra informativa y propagandística sobre la intervención militar que lanzó el Kremlin contra Ucrania.
El regulador ruso de las comunicaciones, Roskomnadzor, explicó en un comunicado que toma esta medida un día después de que Meta, la tecnológica estadounidense propiedad de Mark Zuckerberg, restringiera las cuentas oficiales de cuatro medios rusos: el canal de televisión militar Zvezda, la agencia oficial RIA Nóvosti, el portal Lenta y el diario Gazeta.ru.
La Oficina del Fiscal General de Rusia precisó que Facebook « ilegalmente restringió la difusión a través de usuarios de internet de información socialmente importante en el territorio de la Federación Rusa, incluidos mensajes y materiales de medios registrados, en conexión con la imposición de sanciones políticas y económicas por parte de países extranjeros con respecto a Rusia« .
Las autoridades rusas consideran que ello viola el derecho de los ciudadanos contenido en el artículo 29 de la Constitución rusa a « acceder libremente, recibir, transmitir, producir y difundir información de manera legal », afirmó la Fiscalía.
Roskomnadzor indicó que solicitó el jueves a Meta, matriz de Facebook, que levante las restricciones y explique las razones de su introducción, pero la red social ignoró el requerimiento ruso. Desde que Rusia lanzó el jueves la ofensiva militar sobre Ucrania, las desinformaciones y la propaganda del Kremlin se han multiplicado en las redes sociales.
Meta tomó la decisión de limitar estos medios por « difundir noticias falsas »
Fue este jueves cuando Meta confirmó que había decidido limitar las actividades de estos medios de comunicación, propiedad del gobierno ruso, por difundir « noticias falsas ».
Este viernes, el vicepresidente de la compañía, Nick Clegg, compartía en las redes sociales un comunicado informando de que se ha activado un Centro de Operaciones Especiales con expertos y nativos para frenar la desinformación y « responder a tiempo real y eliminar mensajes de odio o contenido que incite a la violencia”.