Mientras que la emoción del Fútbol pretende unir al país, algunas organizaciones de la República Democrática del Congo se han empeñado en sembrar miedo y tener dividirlo.
Hasta el momento el miedo persiste, al menos 80 civiles han sido ejecutados por disparos y machetazos en 23 ataques atribuidos a las Fuerzas Democráticas Aliadas (ADF), vinculadas al Estado Islámico, durante el mes de enero en el territorio de Beni, en Kivu del Norte, según han denunciado las Fuerzas Armadas congoleñas. Recientemente ayer lunes once personas han muerto en otro ataque perpetrado por presuntos miembros de ADF del Congo contra la localidad de Maziya, cerca de la ciudad de Mangina, en la provincia de Ituri.
El ataque se produjo por la mañana y las víctimas, eran agricultores, fueron asesinadas a machetazos. Los cadáveres han sido trasladados a Mangina, según el alcalde interino, Kathemo Salamu Emmanuel, tal y como ha recogido el portal de noticias congoleño Actualité.
Las ADF, un grupo ugandés creado en la década de los noventa especialmente activo en el este de RDC y acusado de la matanza de cientos de civiles en esta zona del país, podría estar intentando volver a operar en Uganda, de donde se retiró en 2003 tras una serie de operaciones militares que mermaron drásticamente su capacidad para llevar ataques en el país.