En Camerún se incautó una gran cantidad de bebidas alcohólicas falsificadas, producidas en pésimas condiciones higiénicas. Fueron los efectivos de la Comisaría Central de Bafoussam quienes realizaron el registro que condujo al desmantelamiento de la red de falsificadores.
Según el jefe de la brigada contra el crimen, las bebidas que se producían en este sitio eran “consumidas en grandes círculos cuyos nombres no se pueden nombrar”. La historia dice que las miles de botellas que contenían alcohol adulterado podían aterrizar en las mesas de casi mucha gente en Bafoussam.
El desmantelamiento de esta fábrica artesanal es la culminación de una investigación abierta tras una denuncia del dueño de una discoteca.