Con la puesta en vigencia de la nueva Constitución, el pasado sábado, Mali eliminó el francés como idioma oficial. Con la promulgación de la Carta Magna por el líder del Gobierno, el coronel Assimi Goita, se marcó el comienzo de la Cuarta República. Desde ese día, los 13 idiomas nacionales que se hablan en este país de África Occidental reciben el estatus de idioma oficial y el francés, que mantuvo ese estatus desde 1960, se convirtió en un idioma de trabajo.
El francés fue un idioma oficial en Malí desde 1960, pero con la nueva legislación respaldada por el 96,9% del pueblo se ha convertido en la lengua de trabajo de acuerdo a la Carta Magna. El francés se utilizará como idioma de trabajo a partir de ahora, mientras que los 13 idiomas nacionales que se hablan en el país también recibirán el estatus de idioma oficial, en una nación donde se hablan casi 70 idiomas indígenas.
La población habla bambara, fula, soninké, dogón, lenguas songhay y senufo. En los recorridos por el desierto, y fuera de los principales sitios turísticos, la comunicación se hace difícil con la población local. El español y el inglés son absolutamente desconocidos. Este cambio en relación al francés como lengua, refleja la ruptura de Mali con Francia. En 2022, el primer ministro interino de Mali, el coronel Abdoulaye Maïga, emitió un comunicado en las redes sociales en el que anunciaba la decisión del gobierno de “prohibir, con efecto inmediato, todas las actividades realizadas por las Organizaciones No Gubernamentales (ONG) francesa] que operan en el país africano”.
El anuncio se produjo unos días después que el gobierno francés recortara la Ayuda Oficial al Desarrollo (AOD) a Mali, alegando que el gobierno maliense está “aliado con grupo ruso Wagner”, afirmación que Maïga calificó de “acusaciones fantasiosas” y de “subterfugio destinado a engañar y manipular a la opinión pública nacional e internacional con el fin de desestabilizar y aislar al país”.