El Decreto número 23/2022, de fecha 18 de marzo, publicado el pasado lunes 21 de marzo, recoge que la población tiene que seguir practicando las medidas de prevención contra la Covid-19, tales como el lavado constante de las manos y desinfección de las mismas.
Por lo visto, y tras un recorrido realizado por agentes de este medio, se ha observado que son medidas que se están dejando de usar paulatinamente en las instituciones públicas y privadas del país, incluidos algunos establecimientos públicos y privados.
Actualmente, la mayoría de las entidades públicas y privadas, así como algunos los establecimientos ya no se observan tanques de agua en la puerta de entrada y jabones puestos a disposición del público que frecuenta dichos lugares o la puesta a su disposición de geles desinfectantes, lo cual hace que los visitantes, clientes o administrados entren sin lavarse las manos o desinfectarlas como era habitual al inicio de la pandemia.
Incluso, estas medidas de lavado de manos y desinfección de las mismas que se aplicaban estrictamente en los centros escolares, bancos y en los hospitales, a día de hoy están desapareciendo en estos establecimientos o simplemente ya no se exigen como antes.
Muchos establecimientos solo se contentan ahora con exigir al visitante que tenga puesta la mascarilla antes de entrar y desde el pasado 15 de marzo algunos también exigen que se tenga el carné de vacunación.
A pesar de que en estos precisos momentos, de acuerdo a la actualización del ministerio de Sanidad y Bienestar Social, el país registra hasta este 24 de marzo un total de 7 casos activos, 2 casos confirmados, 7 recuperados y una tasa de positividad del 0,1 y que hace bien poco se adquirió el nuevo fármaco Molnupiravir para hacer frente a la Covid-19 en pacientes no hospitalizados, no debemos olvidarnos que la Covid-19 sigue entre nosotros y no debemos bajar la guardia ahora que la curva epidemiológica ha bajado drásticamente en relación a los datos de diciembre, lo que ha permitido la eliminación del toque de queda en el país, el aumento de la frecuencia de los vuelos, entre otras medidas de relajación.