El jefe de la Comisión de la Unión Africana (UA), Moussa Faki Mahamat, llamó a la calma y al diálogo para dar soluciones consensuadas a la crisis en Mali.
La convocatoria de Faki Mahamat también tuvo el propósito de preservar la paz, la estabilidad y la cohesión social en este país de la región del Sahel, que es escenario de manifestaciones demandando la renuncia del presidente, Ibrahim Boubacar Keita.
En un comunicado, el funcionario de la UA también condenó los actos de violencia ocurridos en esas demostraciones callejeras, que causaron la pérdida de vidas, lesiones y destrucción de propiedad pública y privada, así como exigió investigaciones para establecer responsabilidades.
También en esa línea Faki Mahmag indicó la necesidad de hacer justicia con las víctimas y aplicar las sanciones apropiadas a los culpables.
Esa declaración apoya las propuestas de solucionar el disenso hechas por la Comunidad Económica de Estados de África Occidental (CERDEAO), que constituyen una base para la negociación y la resolución de problemas que están en el origen de la crisis maliense.
El expresidente nigeriano Goodluck Jonathan fue nombrado por la CEDEAO como enviado especial al frente de una misión mediadora para Mali, adonde se espera que lleguen para cumplir una gestión de esa índole gobernantes de cuatro países de la subregión.
Los mandatarios de Senegal, Costa de Marfil, Níger y Ghana son esperados en Bamako, adonde deberán llegar a finales de esta semana para celebrar nuevas negociaciones.