“La fecha del referéndum prevista para el 19 de marzo de 2023 (…) se pospondrá levemente”, dijo el vocero del gobierno, el coronel Abdoulaye Maiga, en un comunicado leído a la prensa. Este referéndum es el primer paso que se supone que será validado por la votación en el camino hacia las elecciones de febrero de 2024 y el regreso a un gobierno civil.
La junta justifica este aplazamiento por la instalación de las representaciones del órgano de gestión electoral en todas las regiones del país y por el deseo de popularizar el proyecto de nueva Constitución.
“La nueva fecha para el referéndum se fijará después de consultar con la autoridad de gestión electoral independiente y todos los actores en el proceso electoral”, agregó el comunicado.
Esta constitución es un elemento clave del vasto proyecto de reforma invocado por los militares para justificar continuar gobernando este país hasta 2024, que enfrenta la expansión del yihadismo y una profunda crisis multifacética.
La versión de la constitución presentada como definitiva, entregada al jefe de la junta, el coronel Assimi Goïta, el 27 de febrero, afirma el “apego a la forma republicana y la laicidad del Estado.
Mali ha estado azotado desde 2012 por la expansión del yihadismo y la violencia de todo tipo. La junta expulsó a los soldados franceses en 2022 en medio de una gran acritud y se ha vuelto militar y políticamente hacia Rusia.