El gobierno de transición de Malí ha anunciado este martes 22 del presente mes de noviembre acerca de los litigios que tiene con Francia que anunció el pasado 16 de los corrientes sobre la suspensión de su ayuda pública al desarrollo de Malí, así como la suspensión de la concesión directa a las ONG francesas de los fondos puestos a disposición como parte de La acción humanitaria de Francia en este país del África Occidental.
Tras el anuncio de esta suspensión, el Ministerio de Asuntos Exteriores de Malí considera esta decisión como una medida destinada a manipular la opinión pública e internacional. Las autoridades malienses, por su parte, han anunciado medidas que incluyen la prohibición, con efecto inmediato, de todas las actividades realizadas por ONG que operan en el territorio y financiadas por Francia.
De esta forma, el primer ministro maliense en funciones, el coronel Abdulaye Maiga catalogaba esta medida de parte de Francia como una “acusación fantasiosa y sin ningún fundamento”.
Tan sensible está el tema que el analista político de este país Aboudramane Coulibaly en una reflexión sobre el tema subrayaba que “La suspensión de la ayuda humanitaria de Francia a Malí es insignificante en comparación con la contribución de la diáspora maliense que vive en este país frente a Malí. Así que las autoridades malienses de la transición pueden prescindir de esta ayuda al desarrollo porque durante los 6 meses que duraron las sanciones económico-financieras de la UEMOA y la CEDEAO, Malí siempre consiguió asumir su soberanía en materia económica saldando la deuda interna y pagando los salarios como tales”
Tal decisión de suspender la ayuda al desarrollo a Malí, el temor esencial es tener un efecto dominante con otros donantes, en particular donantes bilaterales como el Banco Mundial y también el Banco Africano que en el marco de la cartera interna de Malí interviene en muchos sectores de actividad, en particular el sector de actividad de la educación y la salud y la agricultura e incluso la seguridad”.
Por lo que, como medida destinada a contrarrestar estas disposiciones francesas, las autoridades de transición malienses han decidido prohibir, con efecto inmediato, todas las actividades realizadas por las ONG que operan en Malí con financiación o con apoyo material o técnico de Francia, incluso en el ámbito humanitario. Recordemos que es desde febrero de 2022 que Francia ha notificado por vía diplomática la suspensión de su cooperación al desarrollo con Malí. Las relaciones entre los dos países se han deteriorado desde el segundo golpe militar en mayo de 2021.