El Gobierno de Níger emitió ayer un comunicado acusando al embajador de la Unión Europea residente en el país de haber repartido 1,3 millones de euros procedentes de los fondos de ayuda humanitaria a varias ONG internacionales de forma injusta y sin contar con lasa autoridades locales.
Los fondos fueron repartidos a los organismos internacionales que ayudaron a las víctimas de las fuertes inundaciones que registró el país en los pasados meses.
La UE ha considerado las acusaciones como infundadas y sin justificantes, por lo que ha tomado la decisión de llamar a su diplomático a Bruselas para realizar consultas.
A pesar de estas tensiones, la UE ha afirmado su compromiso de seguir aportando ayuda a la población sin tener en cuenta las complicadas relaciones con el Gobierno nigerino. «A la luz de la crisis a la que se enfrenta Níger, la UE ha subrayado sistemáticamente su compromiso de apoyar a la población. La ayuda humanitaria es vital, se proporciona de manera neutral, imparcial e independiente, y se implementa a través de agencias de la ONU, organizaciones internacionales y ONG. No hay justificación para politizar la ayuda humanitaria con fines políticos», recoge el comunicado.
Con el cambio de Gobierno hace cerca de un año, las relaciones diplomáticas y políticas entre la Unión Europea y Níger se han visto bastante afectadas. El varías ocasiones el país africano ha mostrado su desentendimiento en las políticas del occidente en el continente, lo cual ha conllevado la ruptura de algunos acuerdos con los países europeos.
