La mayoría de las víctimas son mujeres jóvenes. La estampida se produjo durante un festejo masivo de Halloween que se llevaba a cabo en un callejón estrecho del popular barrio de Itaewon, que es conocido por su vida nocturna. Estas fueron las palabras expresadas por un testigo presencial que describió la caótica escena.
Park Jung Hoon: “Cuando llegamos aquí alrededor de las 10 pm vimos una escena que parecía salida de una película frente al hotel que está allá, como las cosas que suceden durante una guerra. […] Había personas haciendo reanimación cardiopulmonar aquí y allá y la gente entraba corriendo, todo estaba fuera de control. [La situación] estaba completamente fuera de control”.
A pesar de la gran cantidad de personas que asistieron al festejo, muchos testigos señalaron que había poca seguridad o equipos de “control de multitudes” supervisando el evento, y culparon al Gobierno por no evitar dicha tragedia. Según informes locales, asistieron hasta 100.000 personas al festejo del sábado por la noche. Las autoridades están investigando los hechos y el presidente de Corea del Sur, Yoon Suk-yeol, ordenó al Gobierno revisar las medidas de seguridad que había en el lugar.