Sin descanso ni tregua, el Presidente de la República de Guinea Ecuatorial, Obiang Nguema Mbasogo, tras aterrizar este pasado miércoles 1 de noviembre en tierras rusas para una visita de Estado, este jueves 2 de noviembre inició su agenda realizando esta una parada en la Plaza Roja de Rusia, donde depositó un ramo de flores en honor a los soldados soviéticos caídos en la Gran Guerra Patria.
Instantes después, el Jefe de Estado ecuatoguineano, Presidente en ejercicio de la Comunidad Económica de los Estados de África Central (CEEAC) se desplazó en las afueras de Moscú para reunirse con el Presidente de la Federación Rusa Vladimir Putin en su residencia.
En el transcurso de este encuentro, Obiang Nguema Mbasogo y Vladimir Putin intercambiaron elogios, a la par que trataron temas de interés mutuo a fin de robustecer en cada momento los lazos bilaterales de amistad y cooperación en diferentes ámbitos entre Malabo y Moscú.
Conviene recordar que la última visita del Jefe de Estado ecuatoguineano a Rusia fue precisamente para asistir a la Cumbre Rusia -África en Sochi del 23 al 24 de octubre de 2019. Con lo cual, ambos homólogos tenían el deseo de reencontrarse de nuevo para tratar temas de actualidad para fortalecer los lazos de sus respectivos Gobiernos y poder también dialogar sobre temas que afectan a África, si se tiene en cuenta la nueva orientación de la política rusa de acercarse cada vez más a los paises africanos.
Las relaciones entre Guinea Ecuatorial y Rusia fueron establecidas en la década de 1970, cuando la Federación Rusa era parte de lo que era la Unión Soviética y la República de Guinea Ecuatorial acababa de independizarse de España en 1968.
En la década de 1970, la Unión Soviética y Guinea Ecuatorial firmaron numerosos acuerdos y a mediados de la década de 1970 una base de vigilancia establecida por los españoles durante el período colonial en la cima de la montaña volcánica Pico Basilé fue asumida por los servicios de inteligencia soviéticos.