Como habíamos adelantado en la jornada de ayer a través de nuestras cuentas Real Equatorial Guinea en Instagram, X y Facebook, un hecho insólito se produjo ayer en el barrio Sera de Malabo cuando se halló un ataúd junto a dos huevos y velas en un terreno.
Pues bien, es aún más insólito el hecho cuando hemos descubierto la historia que hay detrás de este acontecimiento, al menos la que ha contado a uno de nuestros reporteros un miembro de la familia Boena.
En nuestra ciudad, los problemas de terrenos o tierras, sea entre familias o con desconocidos, son uno de los que más historias dejan que contar en nuestro país Guinea Ecuatorial.
El caso que nos ocupa no es la excepción. Un ciudadano ha decidido tomar como medida de precaución en una disputa de terreno el uso de un ataúd con velas rojas en su alrededor y monedas encima del mismo para frenar al señor que quiere apropiarse de una tierra que, según ha explicado, heredó de su bisabuela.
“Esta es una propiedad nuestra desde que nací, me trajeron aquí para conocer nuestras tierras, apareció un tal Djudju diciendo que el terreno ya es suyo, el señor viene aquí siempre a pelear con nosotros y hace tres días que comenzó a limpiar el terreno”, explicaba el joven.
El joven asegura que utilizó el ataúd para desalojar del terreno tanto a los que trabajan como a la persona que dice que quiere apropiarse de este terreno, por lo que ha recalcado que ” si es dueño de estas tierras y sabe muy bien que le pertenecen que mueva este ataúd, y lo que le pase no me hago responsable”, asegura el joven, quien también ha añadido que lo que no es de uno no tiene que cogerlo con fuerza.
Al encontrar el ataúd en pleno mediodía y en una zona visible, el hecho alarmó a propios y extraños tras su publicación por parte de este medio Real Equatorial Guinea. Las redes sociales se dispararon con la difusión de estas imágenes, lo que causó que las autoridades competentes lleguen también al lugar del hecho. Por ahora, esperamos cómo acabará este asunto.