Los consumidores han avisado a este órgano de una práctica cada vez más común en el sector de la alimentación: la “reduflación”. Se trata de un término con el que se ha bautizado al proceso en el que se reduce la cantidad de un producto, pero que mantiene o incluso incrementa su precio.
Esta estrategia comercial no es nueva y debe su nombre al Reino Unido, donde se aplicó la denominación ‘shrinkflation’ para referirse a este proceso de inflación que se produce en los artículos habituales de la cesta de la compra. En nuestro país afecta a una amplia gama de productos como el arroz, el aceite de oliva, los huevos, pastas, yougures, conservas o productos congelados.
Los expertos indican que esta subida de precios encubierta no es una práctica ilegal, pero “se considera un engaño porque el margen comercial sigue siendo el mismo y quien pierde es el consumidor».
Por su parte, Usuarios expertos en este tema avisan de que se trata de una práctica que se utiliza para camuflar las subidas de los precios y que cada vez se encuentra más generalizada.
A día de hoy se percata una hipotética crisis de ciertos productos tanto en los Supermercados como en los mercados. Y varios productos como el arroz o el aceite sólo por mencionar algunos ya han cambiado de precio. La población teme a que esta situación de inflación de los precios y la escasez de algunos en los mercados y Supermercados podría sea más evidente en los próximos días inclusive semanas o meses.