Dicho y hecho. La panadería Pegasos cumple su amenaza hecha el pasado 21 de marzo cuando anunció por un comunicado colgado en las instalaciones de su sede en Malabo que el precio del bollo y pan subirán el 100%, es decir, que pasarán de 50 a 100 XAF la unidad.
Por lo visto, la panadería se vió obligada frenar su amenaza ante el revuelo que causó su amenaza en las redes sociales y consecuentemente en los ciudadanos, quienes exigían -sin éxito- una explicación racional de esta decisión.
A partir de esta semana que coincide con la vuelta al colegio de los niños después de las vacaciones de Semana Santa, la panadería Pegasos ha cumplido su amenaza. Un pan de pegasos ya se vende a 100 XAF, por lo que el precio anterior de 50 XAF ya es historia, así lo ha verificado un equipo de esta redacción. Lo que también se ha observado es que el tamaño del pan en cuanto a su longitud ha aumentado ligeramente, pero su grosor parece haber dismunuido igualmente.
Por de momento, la panadería no ha hecho otra aclaración con respeto a esta situación y no parece hacerlo ya que los responsables siguen negando a hablar por de momento con los medios de comunicación que se acercan a sus instalaciones.
El elevado precio del pan en Malabo supone sin duda un atropello para gran parte de los ciudadanos que dependen en gran medida de este alimento de primera necesidad.
Las industrias panificadoras pocas de las veces que han dialogado con los medios de comunicación solo se han defendido alegando que la subida sería debido a los altos costos de producción que están afrontando, una subida brusca de sus materias primas como harina, levadura y aceite, lo que les obliga a aumentar ligeramente el tamaño del pan y el bollo, así como su precio de 50 a 100 XAF.
Lo más raro de esta penosa situación es que “el tamaño de estos panes es mucho más pequeño que el pan que salía a 50 XAF nos quieren mentir diciendo que el tamaño ha cambiado, es el mismo pan sólo que el nuevo formato es largo pero de pequeño grosor”, alerta un ciudadano. “Esto es un escándalo, no sabemos por qué hemos de pagar siempre los platos rotos, estas empresas nos abusan como si en este país no hay leyes que nos amparan”, asegura.
Los ciudadanos claman a viento y marea la intervención de las autoridades competentes para que el pan vuelva a costar 50 XAF.