La Gendarmería Nacional ha abierto una investigación contra un grupo de empleados de las empresas públicas SONAGAS y GEOGAM por un posible desvío de 720 mil bombonas de gas y de creación de una estructura que habría desviado más de 2 mil millones XAF.
Después de las ya conocidas tramas de posibles desvíos en Ceiba Intercontinental y en otras entidades y empresas propiedad del Estado actualmente investigadas, hoy se informa de otra trama que también dará mucho de qué hablar.
Según se ha sabido a través del Vicepresidente de la República en un mensaje publicado en su cuenta de Twitter, el grupo de empleados de estas dos empresas habría desviado alrededor de «720 mil bombonas de gas para beneficios propios» y que «desde 2017 tienen montada una estructura corrupta conjunta que ha robado más de 2 mil millones al Estado», recoge el mensaje.
Se investiga en este caso a Josefina Alene, directora financiera de GEOGAM y a su Adjunto Marcos Manuel Ntugu, así como a los directores técnicos de la planta.
Según el Vicepresidente, » al estropearse el software que controlaba la cantidad de gas que se enviaba a GEOGAM para el embotellado, algunos empleados de las dos empresas paraestatales se organizaron para vender gas robado a un precio reducido. En vez de los 3800 del Gobierno, ellos vendían a 3 mil», indica el mensaje.
