Guinea Ecuatorial ha solicitado en la sesión Plenaria de la Asamblea General de las Naciones Unidas el levantamiento de las medidas económicas represivas impuestas a los países en desarrollo, pero sobre todo los del continente africano.
Así lo ha dejado claro el discurso pronunciado por el Embajador Representante Permanente de Guinea Ecuatorial ante las Naciones Unidas, Anatolio Ndong Mba, quien también reiteró el compromiso del país en potenciar la diplomacia de paz.
“Las medidas coercitivas unilaterales extraterritoriales escapan de la observancia mínima del derecho internacional y de la promesa y objetivo común de no dejar a nadie atrás”, ha matizado el diplomático ecuatoguineano, para después argumentar que estas medidas vulneran los principios de igualdad soberana de los Estados y de no injerencia en los asuntos internos de los Estados. Además, impiden el pleno disfrute de los derechos humanos, como el derecho a un nivel de vida adecuado; agravan la situación de los grupos más vulnerables de la sociedad, especialmente de las mujeres, los niños y los discapacitados; distorsionan el comercio y los flujos de inversión; generan un impacto negativo general en la cooperación económica internacional y en los esfuerzos mundiales para avanzar hacia un sistema de comercio multilateral, abierto, transparente y no discriminatorio; también impiden y limitan la resolución de conflictos mediante el fomento del diálogo mutuo, el entendimiento y los medios pacíficos.
Las medidas coercitivas unilaterales se utilizan como instrumento de presión contra los países en desarrollo, ya sea política, judicial, financiera o económicamente, o de cualquier otro tipo para coaccionar a otro Estado con el fin de obtener de él la subordinación del ejercicio de sus derechos soberanos, y así promover sus intereses políticos internacionales. Por esta razón, «empezamos a sospechar que la aplicación de medidas coercitivas extraterritoriales entrañan una alternativa a la fuerza militar, pero sin el sufrimiento y el sacrificio masivos que exige la guerra», aseguró el diplomático
“Pedimos la total eliminación y el levantamiento de las medidas económicas coercitivas de carácter extraterritorial y de otro tipo impuestas unilateralmente a los países en desarrollo o subdesarrollados, particularmente en África”, ha dicho, añadiendo su preocupación por la situación que atraviesa Cuba.
“Manifestamos nuestra preocupación por la precaria situación económico-social y humanitaria que sigue atravesando el pueblo cubano, como consecuencia de la prolongación del bloqueo ilegal contra Cuba por parte de los Estados Unidos y la aplicación de las sanciones económicas, mediante la Ley Helms-Burton. Por consiguiente, y en línea con nuestra solidaridad con este país hermano y amigo, reiteramos nuestra petición a EE.UU, país con el que también mantenemos buenas relaciones, que levante estas longevas y perjudiciales sanciones a Cuba”, puntualizó.