La ciudad de Shanghai vuelve a convertirse en el epicentro del comercio global con la apertura de la 7ª Exposición Internacional de Importaciones de China (CIIE). Esta iniciativa es una de las ferias comerciales más grandes del mundo y se lleva a cabo anualmente desde 2018, invitando a las empresas mundiales a participar y buscar oportunidades de desarrollo.
La exposición ocupa más de 420.000 metros cuadrados y ha contado con la participación de organizaciones internacionales en exposiciones nacionales y empresariales. Se han dado cita cerca de 3.500 expositores de 152 países. El objetivo de este evento es unir a los actores del comercio, aprovechar el vasto mercado chino y reforzar las relaciones.
Durante la ceremonia inaugural, a la que asistieron varios jefes de Estado y líderes empresariales clave de todo el mundo, el primer ministro chino, Li Qiang, en su discurso de apertura dijo: «el nivel arancelario general del país se ha reducido al 7,3 por ciento para superar la meta establecida de un 9,8 por ciento». También afirmó que el país ha aplicado plenamente la totalidad de las medidas de apertura anunciadas en las seis ediciones previas de la CIIE, como es el caso de la eliminación de todos los elementos de la industria manufacturera de la lista negativa nacional para la inversión extranjera.
Asimismo, señaló que China está dispuesta a abrir aún más su enorme mercado y seguirá ampliando el acceso a este de forma ordenada para distintos sectores, como telecomunicaciones, internet, educación, cultura y atención sanitaria.
Más de 400 nuevos productos, tecnologías y servicios se dan a conocer durante este evento, lo que es visto por los expertos como una clara señal de la confianza de las compañías mundiales en el mercado chino y de su compromiso con un mayor desarrollo en el país.
