Este anuncio ha tenido lugar apenas horas después de que Faye tomara posesión de su nuevo cargo en una ceremonia en la que ha estado arropado por otros líderes de la región y en la que ha jurado «cumplir fielmente» el cargo y «observar escrupulosamente las disposiciones de la Constitución y de las leyes», así como «defender las instituciones, la integridad del territorio y la independencia nacional».
Senegal busca pasar página a varios meses de cierta inestabilidad, después de que Sall aplazase por sorpresa las presidenciales y surgiesen dudas sobre su relevo, ya que la Constitución establece que debía abandonar el poder a principios de abril. De hecho, Faye ganó las elecciones en la primera vuelta al obtener más del 54,3 por ciento de los votos frente al 35,8 por ciento del hasta ahora primer ministro, Amadou Ba, que era el candidato oficialista.