Se trata del tercer descenso consecutivo después de que el desempleo marcase un récord en el último trimestre de 2021, cuando alcanzó el 35,3 %.
El número total de personas empleadas en Sudáfrica, la economía más desarrollada del continente africano, pasó de 15,6 millones en el segundo trimestre a 15,8 en el tercero, gracias a la creación de 204.000 puestos de trabajo, mientras el número de sudafricanos en el paro se redujo de 8 a 7,7 millones.
Los ámbitos donde se crearon más empleos fueron, por orden, el sector de las manufacturas, el comercio, la construcción y el transporte, mientras las pérdidas de trabajo se concentraron en el sector financiero, los hogares particulares, la minería y la agricultura.
Si se considera el paro «expandido» -que incluye a trabajadores que no estuvieron buscando empleo activamente por falta de perspectivas u otros motivos-, el desempleo se situó en el 43,1 %, también un 1 % menos respecto a la tasa registrada en el trimestre anterior.
Aunque los jóvenes se mantienen como la franja de edad más golpeada por la crisis de desempleo en el país, con tasas del 59,6 % entre los 15 y los 24 años y del 40,5 % entre los 25 y los 34, el paro para estos grupos se redujo un 1,8 % y un 0,7 % respecto al periodo anterior, respectivamente.
Asimismo, la población mestiza y negra siguió siendo la más afectada por este problema y, de ella, las mujeres negras fueron el grupo que padeció una mayor tasa de paro (39,1 %, cuatro puntos por encima de la tasa general femenina, que se sitúa en el 35,1 %).
Tal como sucedió en el anterior periodo, los nuevos datos son una buena noticia para Sudáfrica, donde se temía que los cortes de luz programados a consecuencia de la grave crisis que sufre la red eléctrica del país provocaran un aumento del paro.