El Ministerio de Educación ugandés ha indicado que la medida afecta a escuelas de preescolar, educación primaria y secundaria del país, adelantando así un cierre por vacaciones que estaba previsto para el 6 de diciembre.
«Hemos decidido acortar dos semanas el periodo de inicio de las vacaciones para hacer frente a la propagación del virus entre estudiantes y personal», ha explicado la titular de la cartera, Joyce Kaducu, tras la muerte de ocho alumnos en los últimos días.
Kaducu ha resaltado que, una vez termine «los niños tendrán que volver de forma inmediata y segura a sus casas», mientras que los centros escolares han empezado a notificar el adelantamiento de los exámenes de fin de trimestre de cara a la aplicación de la medida, según ha recogido el diario ugandés ‘Daily Monitor’.
Uganda declaró el brote de ébola el 20 de septiembre tras confirmar la muerte de un paciente que dio positivo, tras lo que la OMS apuntó que la confirmación tuvo lugar a raíz una investigación del equipo nacional de respuesta rápida tras seis «muertes sospechosas» en el distrito durante el último mes.
El organismo internacional destacó que el brote corresponde a la cepa Zaire. Hasta la fecha se han detectado siete brotes de esta cepa –cuatro en Uganda y tres en Sudán–. Uganda informó de su último caso de esta cepa en 2012, mientras que en 2019 declaró un brote por la cepa Zaire, importado desde República Democrática del Congo (RDC