Quizá pienses que estás envejeciendo y que la edad está haciendo mella en ti. Sin embargo, la ciencia aclara que la edad para ser oficialmente viejo es muy diferente a la que probablemente pienses.
Esta cifra la ha desvelado la Universidad de Stantford, además de dividir las etapas de envejecimiento y las recomendaciones para que este envejecimiento se atrase.
En ocasiones, relacionamos la vejez con nuestro estado de salud. Sin embargo, la Universidad de Stantford ha desvelado que no, que se trata de una cifra. Esa es la de 78 años.
Pero no es una edad al azar, sino que se ha consolidado gracias al análisis del plasma de 4.000 personas entre los 18 y 95 años. Los resultados destacaron que surgen cambios muy evidentes en este plasma a partir de los 78 años.
Además, resuelven que hay tres etapas de envejecimiento que se dividen según las franjas de edad. En la primera franja se encuentran las personas que se encuentran entre los 34 y los 60 años, donde los cambios son leves en este proceso de envejecimiento. En la segunda franja se encuentran las personas que tienen entre 60 y 78 años, edades en las que se acentúan los cambios físicos más notorios. La tercera franja da comienzo en los 78 años.
Cómo retrasar el envejecimiento
Aunque ya se ha desvelado que la vejez depende de la edad y no de los hábitos o el estado de salud, sí que podemos tomar medidas para que éste no se vea tan acentuado.
Para que no se perciban los signos de la edad, deberemos cuidarnos la piel y utilizar productos de calidad. También es importante que prestemos atención a nuestra rutina de sueño y de alimentación. Ligado, por supuesto, a una vida activa y en la que haya hábitos deportivos regulares.
