Las niñas y adolescentes embarazadas ya no podrán ser expulsadas de las escuelas públicas de Zimbabue, como venía ocurriendo en la inmensa mayoría de los casos hasta ahora, en virtud de la enmienda a la Ley de Educación del país que ha entrado en vigor este fin de semana.
El cambio en la legislación, que también prevé que los profesores no puedan castigar con una vara a sus alumnos, fue aprobado por el Parlamento, refrendado por el presidente, Emmerson Mnangagwa, y desde el pasado sábado ya está en vigor, según informan los medios locales.
En virtud de la nueva enmienda, «ningún alumno debe ser excluido de la escuela por no pagar las tasas o por embarazo». África subsahariana cuenta con una de las tasas de embarazo adolescente más altas del mundo, lo que en muchos de los casos se traduce en abandono escolar para aquellas niñas que iban a la escuela, en ocasiones forzado por las propias autoridades y escuelas.
Con este paso, Zimbabue emula a Sierra Leona, que el pasado marzo también optó por prohibir por ley que se impida que estudiantes embarazadas puedan continuar sus estudios.
Por lo que se refiere a los castigos, la enmienda legal estipula que «las medidas disciplinarias deben ser moderadas, razonables y proporcionadas teniendo en cuenta la conducta, la edad, el sexto, la salud y las circunstancias del alumno concernido y los mejores intereses del niño». «Bajo ninguna circunstancia un profesor tiene permitido golpear a un niño», recalca el texto, según el diario oficial ‘Herald’.
El ministro de Educación Primaria y Secundaria, Cain Mathema, ha defendido que la nueva ley es «progresista» mientras que el presidente de la Asociación de Profesores de Zimbabue (Zimta), Sifiso Ndlovu, ha celebrado los cambios, que considera acordes con una sociedad moderna.
El sindicato, que ha participado en la redacción de la ley, está en contra de los castigos corporales porque «son una herramienta anticuada de ejercer disciplina», ha señalado, advirtiendo de que «tiene el efecto de engendrar una sociedad violenta».
«También apoyamos cualquier medida que busque salvaguardar los intereses y derechos de las niñas. Una de estas disposiciones es ilegalizar la exclusión de aquellas que se quedan embarazadas», ha resaltado Ndlovu, incidiendo en que «esto es lo que han hecho otras sociedades y nosotros lo respaldamos totalmente».