El Vicepresidente de la República Teodoro Nguema Obiang Mangué se reunió ayer 13 de junio con los altos mandos de la armada ecuatoguineana.
En este acto, Nguema Obiang Mangué ha denunciado el maltrato físico en el cuerpo castrense y ha prohibido esta práctica en todos los ejércitos del país.
El Encargado de Defensa y Seguridad del Estado ha tomado esta decisión tras informarse, a través de las redes sociales, de la brutal paliza que sufrió una militar a manos de su jefe inmediato. Un maltrato que llevó a la víctima a que sea hospitalizado. Estos hechos se produjeron en la isla de Corisco.
Para limitar la proliferación de este fenómeno en el seno castrense, el máximo responsable de las carteras de Defensa y Seguridad ha instruido a los ministros de esos dos departamentos a tomar las medidas adecuadas para dar coto a esta situación, a la par que ha recomendado organizar cursos de reciclaje para los oficiales y suboficiales.
También en la reunión se ha apelado al conjunto del Cuerpo Uniformado a que se respete el secreto profesional y se ha matizado que «los asuntos de Defensa y Seguridad deben ser tratados por cadenas de mando y no ser expuestos al público en general». En este contexto, el Vicepresidente ha dejado claro que cualquier militar que volviese a cometer este delito será castigado según la ley.
Nguema Obiang Mangue asegura que el maltrato físico no es el mejor castigo para corregir el comportamiento de un militar. Ha recordado que existe un reglamento donde todas las faltas están tipificadas con sus correspondientes castigos. A modo de ejemplo, ha citado la retención de días de