El Gobierno ha anunciado la apertura de 1.051 nuevas plazas en la administración pública, en el marco de su estrategia para modernizar y fortalecer la gestión del Estado. Esta decisión responde a la necesidad de cubrir las vacantes generadas por la jubilación de más de mil de funcionarios y de garantizar una transición ordenada en la administración central.
La medida fue confirmada este martes 11 de febrero durante una reunión de trabajo en el Palacio del Pueblo de Malabo, presidida por el vicepresidente de la República, Teodoro Nguema Obiang Mangue, quien estuvo acompañado por el Primer Ministro del Gobierno, encargado de la Coordinación Administrativa Manuel Osa Nsue Nsua, así como los ministerios de Función Pública, Hacienda el Departamento de la Tesorería y Patrimonio del Estado.
El informe presentado por el Ministro de la Función Pública, Reforma Administrativa y Seguridad Social, Muatetema Baita, detalló que 387 funcionarios serán jubilados del ejercicio 2024, 549 en 2025, y 115 han sido registrados como fallecidos, lo que hace imprescindible la incorporación de nuevos talentos para garantizar la operatividad y eficiencia de las instituciones estatales.
En este contexto, el Gobierno busca optimizar la gestión en la administración pública con una plantilla renovada, capacitada y comprometida con los principios de transparencia y servicio al ciudadano.
El Vicepresidente de la República ha manifestado a la comisión que en el reclutamiento de los nuevos funcionarios se debe priorizar a los postulantes que, habiendo aprobado el concurso-oposición de las 4.000 plazas ofertadas por el Gobierno en fechas pasadas, no pudieron incorporarse debido a la limitación de vacantes. En este sentido, los candidatos con las mejores calificaciones entre los no seleccionados con anterioridad tendrán preferencia en el proceso de adjudicación de los puestos, tal y como lo prometió en la pasada convocatoria.
Asimismo, Nguema Obiang Mangue subrayó la necesidad de evitar cualquier tipo de favoritismo o irregularidad en la asignación de estas plazas, exhortando a la comisión encargada del proceso quw garantice un procedimiento transparente, justo y basado en criterios objetivos.
Para asegurar la rápida incorporación de los nuevos empleados públicos, la segunda figura política del país ordenó la presentación inmediata de un informe detallado con la distribución de vacantes por sector, la cantidad de puestos disponibles en cada área y los resultados de los exámenes previos de los postulantes.
El objetivo del Ejecutivo es que las 1.051 plazas sean ocupadas lo antes posible por profesionales cualificados, con experiencia en sus respectivos sectores y comprometidos con el desarrollo de la nación.
Esta iniciativa no solo representa una oportunidad de empleo para muchos ecuatoguineanos, sino que también refuerza la estructura del sector público, mejora la calidad del servicio a la ciudadanía y contribuye a la modernización del aparato estatal.
