Con ocasión a la celebración del Día Internacional de los Derechos Humanos, que se celebra hoy 10 de diciembre, la ONUSIDA cree que el respeto a todas las personas es fundamental para superar esta pandemia. « El respeto de los derechos humanos de todas las personas es clave para superar la pandemia de sida », aseguró Winnie Byanyima, Directora Ejecutiva de ONUSIDA.
No obstante, la ONUSIDA ve la necesidad de que se reforme legislación y las políticas para garantizar los derechos humanos de todas las personas que viven con el VIH, incluyendo a mujeres, niñas, poblaciones marginadas, homosexuales, personas transgénero, consumidores de drogas y trabajadoras sexuales. « Está claro que cuando los colectivos de personas sufren violaciones de los derechos humanos, la respuesta al VIH se debilita », afirmó Winnie Byanyima.
Una propuesta que cobra mayor fuerza con los datos que arroja el informe publicado antes del Día Mundial del SIDA, titulado »Desigualdades Peligrosas », el cual revela cómo las violaciones de los derechos humanos obstaculizan la respuesta al SIDA, la estigma social, la discriminación, la criminalización y la marginación fomentan la aparición de nuevas infecciones entre los grupos de población clave, porque les impiden el acceso a los servicios de prevención, tratamiento y atención del VIH.
El mismo reporte indica que en 68 países todavía existen leyes que penalizan las relaciones entre personas del mismo sexo, lo que impide la prestación de servicios adaptados a los colectivos más afectados por la pandemia y disuade a la población de acudir a los centros de salud pública.
En el África subsahariana, algunos estudios han constatado que en los países donde existe este tipo de discriminación, la incidencia del VIH es mucho mayor entre los homosexuales, así como entre las trabajadoras y trabajadores sexuales, que en los países donde no está penalizado. Más de la mitad de las nuevas infecciones por el VIH se dieron entre los grupos de población clave y sus parejas.