El primer caso de la Covid-19 detectado en Guinea Ecuatorial fue de una ecuatoguineana que procedía de un vuelo internacional. Así lo había informado el 14 de marzo de 2020 el Ministro de Sanidad y Bienestar Social de aquella época doctor Salomón Nguema Owono en un comunicado leído por televisión por él mismo. Algo que a día de hoy ya no se da que se lean cada vez la cifra de contagiados en la televisión, puesto que las cifras sobre la evolución de la Covid-19 en el país ya son accesibles a través de una página web creada por este departamento ministerial de sanidad
Desde aquel momento en que se anunció el primer caso positivo, la República de Guinea Ecuatorial, a través de los Comités Técnico y Político de Lucha contra la Covid-19 y otras entidades públicas y privadas, nacionales y extranjeras, se han volcado en un arduo trabajo para hacer frente a esta pandemia que está reescribiendo una nueva historia en la humanidad y cuyas consecuencias han llegado prácticamente a todos los países.
Grandes retos científicos, organizativos, económicos, personales, así como emocionales, entre otros, han ido sucediendo desde aquel primer caso positivo e incluso ha habido cambio de ministro en el ministerio de sanidad y bienestar social. Hemos perdido a cientos de seres queridos y otros lo han pasado mal estando ingresados en los hospitales por culpa de la Covid-19, un virus que sorprendió a la humanidad y cuyas mutaciones no han dejado de sorprendernos.
La población ecuatoguinea ha tenido que adaptarse, al igual que en la mayoría de los países, a los confinamientos, restricciones de movilidad, medidas evitar la transmisión del nuevo coronavrius, entre otros. Si el primer confinamiento fue duro y una gran novedad para la población ecuatoguinea, con los siguientes confinamientos habíamos aprendido un poco y resultaron menos pesados que el primero y aun así seguía siendo una situación extraña, unido a los toques de queda como si de una guerra se tratara.
Todo ha supuesto y sigue suponiendo un gran desafío para la sociedad ecuatoguineana, sobre todo para los sanitarios, investigadores que buscan soluciones y para el Gobierno también ante el desafío de encontrar el equilibrio adecuado entre salvar vidas y salvar la economía de las familias para evitar su empobrecimiento. Con el paso del tiempo nos hemos ido acostumbrando al distanciamiento social, a las cuarentenas obligatorias tras un viaje al extranjero, el uso de las mascarillas, de los geles desinfectantes y así poco a poco le hemos dado la bienvenida a la «nueva normalidad» como quienes dicen que, como este huésped no se irá pronto, pues vamos a acostumbramos a convivir con él. Una situación que ha ayudado la vacuna china que utiliza Guinea Ecuatorial, la cual se ha hecho prácticamente obligatoria para todos los ciudadanos.
Mientras este Covid-19 seguirá dejando muchas historias que contar, actualmente, según la última actualización revelado por el Ministerio de Sanidad y Bienestar Social, en los últimos siete (7) días se han detectado cuatro (4) nuevos casos positivos de Covid-19 en el país. Con lo cual, el número de casos acumulados hasta el momento asciende a 15.898. Igualmente, se ha dado de alta a 7 pacientes y el número de recuperados es de 15.679, mientras que los que las personas fallecidas durante estos dos años han sido de 183, una cifra bastante baja si se compara con otros países que han perdido miles e incluso millones de personas.
