Este martes los servicios de limpieza del Ayuntamiento habrían descubierto una especie de «amuletos» en el puesto de venta de Esther Ada, vendedora de verduras en el mercado de Bikuy, a quien ahora se acusa de usarlos como «magia negra» para bloquear la venta de otros comerciantes.
La mujer niega rotundamente las acusaciones y afirma que los fetiches encontrados en su puesto de venta no tienen ningún propósito dañino. Según su declaración, dichos objetos fueron preparados por su hermana con la única intención de protegerla a ella y su mercancía frente a posibles intentos de robo en el mercado.
Según relatan testigos, la mujer propietaria de los fetiches se había opuesto en varias ocasiones a las labores de limpieza del lugar, lo que despertó sospechas entre las demás vendedoras. Éstas afirmaron que la mujer siempre lograba vender más que cualquiera, lo que les llevó a pensar que los objetos descubiertos eran utilizados para atraer clientes de manera «sobrenatural».
El lugar donde se encontraban los fetiches fue finalmente limpiado, gracias a la intervención de agentes del orden público, quienes garantizaron que las labores de saneamiento se completaran pese a la resistencia inicial de la mujer.
Este hecho ha desatado un intenso debate en la comunidad del mercado de Bikuy sobre el uso de objetos de «magia negra» en espacios públicos. Mientras tanto, el Ayuntamiento sigue adelante con las labores de limpieza y mantiene una estricta supervisión en el mercado de Bikuy para garantizar el orden y la salubridad del lugar.
Según la alcaldesa del distrito número 2 de Bata, Sonia Oyana Edu, la supuesta hechicera llevaba varios días poniéndole resistencia a los mandatos de la municipalidad, obstaculizando con esa actitud los servicios de limpieza.