El caso de la venta de un avión de marca ATR de la compañía aérea Ceiba Intercontinental ya ha llegado a juicio. Este 19 de agosto, se ha continuado con este juicio, teniendo como procesado a Ruslán Obiang Nsue, siendo el único que ha podido prestar declaración ante el Juez de Instrucción N° III de Malabo, pese que también se citó a los señores Sergio Abeso Tomo, Marcelino Owono Edu, Luciano Esono Bitegue, entre otros, los cuales no se han presentado, mientras que Alfonso Osa Nguema, quien ha estado, pero salió para no regresar más.
Durante la declaraciones, Ruslán Obiang Nsue reconoció haber firmado un contrato por valor de 250 mil Euros ( más de 160 millones XAF) por la compra venta del avión, aunque asegura que en este momento el ATR en cuestión ya le faltaban unas piezas. Asegura además que todo fue con el consentimiento del Consejo de Administración de Ceiba Intercontinental.
«Reconozco el primer pago de 125 mil € y los ingresé a mi cuenta de Ibercaja en España. Yo no cobré el resto del dinero (segundo pago). Quise ingresar en la cuenta de Ceiba, pero el gestor me advirtió que hay una anotación de embargo de la cuenta de Ceiba. 400 mil Euros por una denuncia que puso Charming Power, porque prestaban un servicio en las oficinas de Ceiba en España», detalló.
Con el dinero recibido, el procesado Ruslán Obiang asegura que los usó para cubrir o reducir las deudas que tenía la compañía aérea en aquel momento. «Pagué los gastos que Ceiba ya tenía. Pagué a AENA por el estacionamiento del ATR, Iberia Herling para reducir la deuda y catering a los aviones. Cumplí con el mandato del Consejo de Administración, cual era conseguir fondos para oxigenar a la compañía y reducir las deudas», reconoció Obiang Nsue.
Respondiendo a la Abogacía sobre cómo puede reponer este dinero que recibió, el procesado ha asegurado que hará lo siguiente: «Puedo hacer un primer ingreso de 40 millones XAF y voy a estar pagando 4 millones XAF por cada mes», aseguró. Pese a ésto, la Abogacía del Estado cree que si Ruslán Obiang ha actuado de esta forma es porque se lo han permitido, y es más, hechan en falta una querrella interpuesta por el Consejo de Administración de Ceiba Intercontinental. «Para la abogacía, si Ruslán vendió el ATR es porque el Consejo de Administración de Ceiba se lo permitió», aseguró la Abogacía de Estado.
«Han abusado de Ceiba con letras mayúsculas. A río revuelto, ganancia de pescadores. Por eso, eché en falta la querrella criminal contra el Consejo de Administración. Ruslán no es un santo, se ha beneficiado, porque le han dejado que haga lo que quiera. Estamos ante una serpiente y nos encontramos en la cola, ¿dónde está en tronco completo? Que es el Consejo de Administración. ¿A quién se debe juzgar y a quién no?», cuestionó la Abogacía del Estado.
Atendiendo a las declaraciones, la Fiscalía cree que Ruslán Obiang cometió tres delitos. «Primer delito: abuso de funciones, porque vendió el ATR sin previo consentimiento. Solicitamos 6 años de prisión en su grado mínimo, porque ha colaborado en el proceso de investigación. Segundo: abuso de bienes de interés general, solicitamos el grado mínimo de 6 años. Y tercero: malversación de fondos públicos. Los dos cheques están a nombre de Ceiba Intercontinental y los dos han sido cobrados por Ruslán. El dinero de la venta ha entrado en su cuenta y no han sido justificados. Pedimos 6 años de prisión. Y tiene que indemnizar más de 491 millones XAF», manifestó la Fiscalía
Por su parte, la Abogacía del Estado solicita que el procesado pueda restituir el dinero cobrado del primer pago. «Restituir los más 82 millones de XAF, solicitando el embargo de sus bienes en caso de no poder pagar», subrayó la Abogacía de Estado.