Inusual es la imagen que presenta uno de los vehículos que ofrece el servicio de taxi interurbano en la ciudad de Malabo. Según hemos podido hablar con el taxista, que resulta también ser el dueño del mismo, ha asegurado que ésta es la única solución que ha encontrado para protegerse de los constantes asaltos que sufren los conductores de parte de los delincuentes que se hacen pasar por clientes, sobre todo en las noches.
Las rejas separan asientos traseros con los de delante y todo bien forjado. El conductor ha reconocido que los agujeros de las rejas son muy grandes, y que en un plazo de tiempo muy reducido volverá a modificarlo consiguiendo que la separación entre rejas sean más pequeña «para que cuando uno ponga su mano, le sea un poco difícil de agarrarme aquí delante», justificó el taxista.
Esta estrategia adoptada por el taxista, quien no ha querido revelar su identidad, surge por el miedo a ser agredido por los delincuentes, lo cual hace que no sólo él, sino la población entera empiece a buscar maneras de protegerse por cuenta propia.
El dueño del vehículo lo califica de «único» en la ciudad de Malabo y presagia que en fechas próximas muchos copiarán su sistema de autoprotección. «Se que otros me van a copiar», señaló.