A cuatro días del mes de enero del nuevo año 2023, el país empieza ya a contabilizar muertes resultantes del festejo de las fiestas de año nuevo o en circunstancias todavía no específicas en diferentes localidades del territorio nacional.
De esta manera, el pasado lunes se encontró en la playa de Sipopo dos cuerpos sin vida de ciudadanos que se fueron a bañar, pero que desaparecieron para luego aparecer flotando en la orilla un tiempo después.
En esta misma jornada, se halló el cadáver de una mujer de aproximadamente 50 años de edad de nombre Esperanza Ada Mba en el río Kie de la capital de la Provincia de Wele Nzas, Mongomo. Los familiares de la finada señalan que ella era epiléptica y posiblemente al intentar cruzar el río pudo haber sufrido una crisis epiléptica, cayendo así al agua y habría fallecido por ahogamiento.
Y como fuera poco, este martes se ha encontrado el cadáver de Carmelo Ebana Edu en un estado avanzado de descomposición en el interior de su casa. Fue su sobrina quien encontró su cuerpo en el barrio de Ecobenam de la ciudad de Bata. Según asegura el forense, la victima podría haber fallecido supuestamente por haber ingerido alcohol durante las Fiestas de Navidad y Año Nuevo.
